El dicho dice que "los opuestos se atraen" y eso incluso puede ser cierto, pero no siempre es posible que puedan permanecer juntos mucho tiempo cuando hablamos de una relación saludable.
Más allá de las pequeñas diferencias, como el sabor de las películas y el postre favorito, hay algunas cosas que, en su mayor parte, no se pueden negociar en una relación porque representan una violación de los valores personales. Conoce los principales:
1. Planes para el futuro
Para que una relación funcione, es esencial que usted y su pareja tengan la misma visión para el futuro: dónde planea vivir, si quiere tener hijos, qué nivel de vida desea, etc.
Tener un "norte" te ayuda a darte cuenta de lo que cada uno debe hacer a diario para que puedas alcanzar estos objetivos. Y, por supuesto, si no tiene el mismo "norte", es posible que deba repensar algunas opciones o la relación misma.
2. La posibilidad de ser tu mismo
Todos tenemos algunas "máscaras" que adoptamos para poder vivir en el trabajo o en otros entornos sociales. Pero en casa y con tu pareja, debes sentirte cómodo siendo tú mismo, y él también. De lo contrario, con el tiempo, te sentirás frustrado contigo mismo porque ya no reconoces quién eres.
3. Los dos pueden admitir cuando están equivocados
No existe una relación perfecta, y las discusiones son normales e incluso saludables, siempre que sean respetuosas y sirvan para ajustar las cosas entre ustedes. Lo que realmente importa en este caso es que ambos reconocen sus propios errores y pueden disculparse.
Cuando la relación aún no es muy sólida, la tendencia es querer disfrazar nuestros errores. Pero cuando estamos con alguien que está realmente dispuesto a entendernos y mejorar las cosas, te sientes más cómodo tomando un fracaso y encontrando una solución.
4. Tienes los mismos valores éticos y morales.
Uno de ustedes no tiene problemas para ganar un porcentaje sobre el trabajo del condominio sin que los vecinos lo sepan, mientras que el otro piensa que todo debería estar claro. Uno hace un punto de seguir todas las reglas, pero el otro siempre busca una manera más fácil de hacer las cosas, incluso si eso significa romper algunas reglas.
En este caso, la diferencia entre los valores éticos y morales puede conducir a una gran decepción en la relación, ya que uno se sentirá limitado y el otro sentirá que sus principios han sido irrespetados.
5. Hay una conexión emocional.
Tener atracción física es esencial para que exista una relación, pero eso por sí solo no es suficiente. Sin una conexión emocional, no habrá un deseo real de construir un futuro juntos, es solo una relación momentánea.
Si eso es lo que estás buscando, está bien. Sin embargo, si desea que una pareja tenga una relación a largo plazo, debe haber afecto e interés mutuo entre usted.
6. ¿Maneja el dinero de manera similar?
Por supuesto, no debe abrir una cuenta conjunta con su pareja dentro de la primera semana, pero la forma en que maneja las finanzas es muy importante para construir una relación duradera.
Hay personas que eligen vivir en el presente y, por lo tanto, no se preocupan por ahorrar. Otros, sin embargo, ponen el futuro primero y siempre buscan ahorrar una buena cantidad cada mes. Si bien cada uno debe ocuparse de sus propias finanzas, debe tener una visión similar de la mejor manera de manejar el dinero.
7. Ambos tienen el mismo interés en el sexo.
Cuando dos personas tienen diferentes niveles de interés en el sexo, una siempre se sentirá frustrada y rechazada, mientras que la otra se sentirá presionada todo el tiempo. Por lo tanto, es muy común que el sexo se convierta en una moneda de cambio entre la pareja, algo que no es saludable para la relación.
8. Ambos dan el mismo valor por pasar tiempo a solas.
Para que una relación sea duradera, es importante que ambos den igual importancia al tiempo que pasan juntos. Puede ser que a una pareja le encanta salir en clase y siempre está buscando una actividad que involucre a más personas, mientras que la otra da preferencia a que la pareja esté sola.
En este caso, puede haber una disparidad en el nivel de atención y dedicación percibidas: mientras que uno encontrará que él o ella ya está pasando suficiente tiempo con la pareja para incluirlo en su programación social, el otro puede sentir que la relación no se está valorando como debería ser. .
9. ¿Tiene la misma opinión sobre los niños?
Si su pareja está loca por tener hijos y simplemente no se identifica con la maternidad, está claro que en algún momento tendrá algunos obstáculos en la relación.
Es posible que aún no esté seguro de sus planes familiares, pero es importante que aclare lo que cada uno piensa al respecto.
10. Opiniones similares sobre religión y política.
Es posible que desee evitar tocar estos temas entre amigos o en el entorno profesional, pero es esencial que usted y su pareja tengan opiniones similares cuando se trata de temas delicados como la religión y la política.
No necesariamente tiene que tener la misma creencia o voto para este o aquel candidato, pero es crucial que haya un buen diálogo y que ambos sean flexibles. Cuando no hay espacio para el debate, puede ser muy difícil lidiar con opiniones extremas.
11. Ambos tienen el mismo deseo de crecer.
Puede soñar con especializarse académicamente, comenzar un negocio exitoso o conseguir un trabajo importante en el extranjero. O bien, puede estar feliz de tener un trabajo estable y un automóvil en el garaje.
Independientemente de sus sueños, es importante que ambos compartan el mismo deseo de crecer (¡o no!). De lo contrario, uno terminará sintiéndose irritado por la aparente consternación del otro, y el otro no entenderá por qué la pareja simplemente no lo deja solo.
Las pequeñas diferencias son naturales y completamente esperadas: después de todo, ¡no estás relacionado con el espejo! Sin embargo, hay algunos puntos que pueden ser difíciles de abandonar. Cuando estas grandes diferencias se ponen debajo de la alfombra, socavan la relación por adelantado. Por lo tanto, siempre está indicado recurrir al diálogo desde el comienzo de la relación.