No tiene mucho sentido comprar mil productos milagrosos para el cuidado del cabello si el lavado se hace mal. La forma en que se aplican los productos en el cabello, la temperatura del agua y la forma de masajear influyen en la salud del cabello y, en consecuencia, en su belleza.
Vea cómo lavarse el cabello como lo hacen los profesionales cuando hacen que las mujeres se vean hermosas en salones de belleza y spas especializados en tratamientos para el cabello y el cuero cabelludo:
1 – Cepilla tu cabello antes de entrar a la ducha
Cepillar tu cabello antes de mojarlo en el baño es fundamental, ya que deja las hebras más suaves y tersas y evita la rotura provocada por los intentos de desenredarlas mojadas.
“Peinar el cabello empapado o incluso un poco mojado no es bueno, ya que el agua los mantiene unidos. Incluso con el uso de cepillos de cerdas espaciadas o peines de madera, esto suele dejar el cabello erizado, porque se rompe en diferentes tamaños y se deshilachan las puntas ”, explica la peluquera Suely Andrade.
2 – Champú dos veces
Aplicar el champú dos veces en el cabello no es la leyenda del fabricante para que gastes más producto. La primera vez que el champú actúa como una especie de imprimación, es decir, limpia los malos residuos, la segunda vez que el champú consigue que sus principios activos penetren mejor.
3 – Usa agua tibia al principio
El lavado del cabello debe iniciarse con agua tibia para abrir la cutícula del cabello y permitir que el champú entre, limpie y deje sus nutrientes.
4 – Exprime el cabello antes de aplicar el acondicionador
El cabello excesivamente mojado hace que el acondicionador corra suavemente por el cabello y no penetre entre los mechones, lo que significa que, además de no hacer que funcione tan bien, el producto se desperdiciará.
5 – No use acondicionador en el cuero cabelludo
El cuero cabelludo ya produce una gran cantidad de aceite natural y la aplicación de acondicionador en esta región provocará problemas como la proliferación de hongos, lesiones rojizas, picor y descamación de las capas de costra adheridas a la cabeza.
Estos problemas, además de ser desagradables en sí mismos, también dañan el cabello, ya que los nutrientes tendrán dificultades para llegar a los hilos, que serán más frágiles y susceptibles a roturas y caídas. Por lo tanto, el acondicionador solo debe aplicarse en la mitad y las puntas del cabello y en una cantidad equivalente al tamaño de un centavo.
6 – Deja que el acondicionador actúe
Después de aplicar el acondicionador, es importante dejarlo en el cabello al menos dos minutos para que dé más definición al cabello, especialmente a los rizados.
7 – Enjuaga tu cabello con agua fría
Al enjuagar tu cabello después de aplicar el acondicionador, usa agua fría, ya que así como el agua tibia abre la cutícula, el agua fría cierra, es decir, los beneficios hidratantes del acondicionador quedarán atrapados en el cabello, dejándolo sedoso y lleno de brillo.
Además, es fundamental refrescar el cuero cabelludo con agua fría, para que el cambio de temperatura estimule la circulación sanguínea, y en consecuencia, facilite la transmisión de nutrientes a los hilos, y también para que el frío prevenga la producción excesiva de aceite que provoca mal al cuero cabelludo, dejando el cabello feo y dañado.