Es posible que haya oído hablar de la dieta mediterránea, inspirada en la dieta típica de regiones como el sur de Italia, el sur de España y Grecia. En estos lugares, incluso consumiendo alimentos ricos en grasas, las personas tienen tasas más bajas de enfermedades cardiovasculares.
El secreto de esto es el hecho de que las grasas en la dieta mediterránea son esencialmente beneficiosas para nuestro cuerpo, y uno de los principales alimentos en este menú es el aceite de oliva, que se usa ampliamente en varias preparaciones.
A continuación encontrará ocho razones para aumentar su consumo de aceite de oliva en su vida diaria, ya sea que se use como condimento para ensaladas y pescados, como ingrediente en pastas a base de granos o incluso en ayunas ingeridas. Recuerde que el aceite de oliva virgen extra, que es la versión menos procesada, conserva mejor sus propiedades beneficiosas.
1. Ayuda a prevenir el cáncer
Las aceitunas y el aceite de oliva contienen antioxidantes, como los acteósidos, el tirosol y los ácidos fenilpropriónicos, que combaten el daño causado por los radicales libres en el ADN de la célula. Además, también proporcionan componentes como el escualeno y los terpenoides, que ejercen actividad anticancerígena (1).
2. Contribuye a la belleza.
Aunque es bastante común usar aceite de oliva directamente sobre la piel, las uñas y el cabello, comer este alimento también es beneficioso para la belleza, tal vez incluso más que la aplicación tópica. Usar aceite de oliva por vía oral ayuda a prevenir y tratar el acné y la piel seca, y acelera el crecimiento del cabello y fortalece las uñas.
3. ¿Desintoxica el hígado?
El aceite de oliva es un excelente agente de limpieza para el hígado, el órgano responsable de nuestro metabolismo y de controlar prácticamente todos los demás órganos, directa o indirectamente. Precisamente por esto, a veces puede sobrecargarse y necesitar una desintoxicación.
Para esto, se recomienda consumir diariamente una cucharada de aceite de oliva mezclado con media cucharada de jugo de limón, lo que ayuda a potenciar el efecto desintoxicante.
4. Fortalece la inmunidad
El aceite de oliva es rico en ácidos grasos que ayudan a fortalecer nuestro sistema inmunológico, pero sin aumentar la actividad inflamatoria del cuerpo, lo que podría conducir a enfermedades autoinmunes (2).
¿Te pareció confuso? Comprendamos: nuestro sistema inmunitario debe estar preparado para detectar y destruir los microorganismos que causan enfermedades. Sin embargo, si la actividad de este sistema se exacerba en gran medida, las células de defensa pueden comenzar a atacar a agentes inofensivos (como un grano de polen que causa rinitis) o estructuras corporales saludables (como las articulaciones que causan artritis).
La ventaja del aceite de oliva en toda esta historia es que regula el sistema inmune y fortalece las defensas contra virus y bacterias, pero sin aumentar la actividad inflamatoria.
5. Contribuye a la salud del corazón.
¿Has oído que el aceite de oliva es bueno para el corazón? Esto se debe a que es rico en grasas saludables, como omega 3. Por lo tanto, contribuye a elevar los niveles de colesterol bueno (HDL) y a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) (3).
Como resultado, el aceite de oliva reduce la tendencia a acumular placa en las arterias, lo que podría romperse y bloquear el flujo sanguíneo, la principal causa de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
6. Lucha contra el dolor
Los estudios en ratas han demostrado que el aceite de oliva virgen extra tiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias y es capaz de potenciar el efecto de medicamentos como el ibuprofeno (4, 5).
Los resultados aún no se han probado en humanos, pero esta investigación indica que una dieta que contenga aceite de oliva puede contribuir a reducir los niveles de dolor crónico e inflamación.
7. Ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre
Algunos estudios científicos han demostrado que incluir el aceite de oliva en las comidas ayuda a reducir los niveles de glucosa en la sangre inmediatamente después de comer, lo que podría prevenir el empeoramiento de la diabetes (7, 8).
Además, junto con la reducción de los niveles de colesterol malo, la reducción de la concentración de azúcar en la sangre también es un factor protector del corazón y el sistema cardiovascular.
8. Protege las funciones cerebrales
El aceite de oliva virgen extra es rico en polifenoles, antioxidantes que se han relacionado con la prevención y la reversión de los déficits de memoria y aprendizaje causados por el envejecimiento o la enfermedad cerebral degenerativa (9).
Por lo tanto, una dieta con cantidades significativas de aceite de oliva puede ayudar a mejorar la capacidad de retención de nueva información y prevenir la aparición de enfermedades cerebrales como la demencia senil, la enfermedad de Alzheimer y la enfermedad de Parkinson.
Ahora ya sabe por qué la dieta mediterránea es tan famosa por sus beneficios para la salud: ¡gran parte del beneficio de esta dieta es el uso del aceite de oliva!
Además de dar preferencia a este ingrediente para sazonar sus ensaladas y otros platos (y dejar de lado las salsas grasosas), también puede probar el truco de consumir una cucharada de la versión de ayuno extra virgen. Observe los efectos en su cuerpo y luego cuéntenos en los comentarios.